Estoy dispuesto a la vida, al tiempo y al viento, lo que traiga y se lleve. A lo que puedo tomar, abrazar y dejar.
Cuando el tiempo se detiene empiezo a conversar con mi piel, mi espalda de pronto reclama por los días, envidiosa de mi garganta que descansa de haber dicho todo. Mi mente, perdida con mis pies y la oscuridad temporal del día, funciona a ratos, de pronto se sienta, de pronto se levanta y mira por la ventana. De pronto viene la nostalgia y se sienta en el borde, cerca de las cortinas. De pronto se va, porque llega el orgullo, el cual cree arreglar todo y solo estropea las cosas beneficiando a la moral. Mi mente, volatil y al viento ya no quiere orgullo, ni miedos.
Un poco de silencio por favor y que las fuerzas vengan con el sol.
ya llegaran
ResponderBorrarmil años sin saber de tiii miguel , sigues escribiendo igual de bien , espero que te vaya muy bien en todooo allá en valpo , cuidate mucho , chau
ResponderBorraradoro la imagen de la cabecera de tu blog <3
ResponderBorrares preciosa...
tengo fotos que mostrarte..! :-)