Somos como un libro abierto.
A veces inciertos
con páginas en blanco,
con borradores,
con capítulos e indices,
con glosarios y epílogos.
Somos como un libro abierto
para aprender, corregir, enseñar y mirarnos el ombligo
Para aprender, también, de nosotros mismos;
de nuestra caligrafía,
de lo que queremos escuchar
y de lo que amamos.
Somos como un libro abierto
Sincero, expectante y silencioso.
Cargado de placeres, intimidad y caminos.
Cargado de sonrisas, nervios y vergüenza.
Somos como un libro abierto
el cual dice que podemos aprender a amar
y llegar al punto de no poder mantener los ojos abiertos de todo el intenso placer
que podemos llevar en nuestras páginas.
Somos como un libro abierto
donde de pronto, nos llenamos de cosquillas con cada línea que es declarada entre líneas.
donde de pronto, se nos aprieta la garganta o el pecho se nos incendia.
donde de pronto, tenemos un final que es circular,
inevitable y disminuido debido a las mágicas páginas que nos enseñan a amar la trama.
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