Ya dejamos de vivir.
Nos enfermamos.
En el preciso momento en que cazamos y no era para alimentarnos,
ni para abrigarnos.
Nos enfermamos cuando las casas que construíamos ya no eran para vivir en ellas.
Nos enfermamos cuando el miedo, desde la ilusión, se presentó como un condicionante frente a nuestra realidad.
Cuando los simbolos y los espiritus dejaron de ser parte de nuestro lenguaje y comenzaron a tener interpretaciones, así como el democrático, contraproducente y contradictorio lenguaje actual.
Cuando Dios quiso ser alimentado bajo presupuestos y dejó de creer en la Tierra.
ResponderBorrarCuando el hombre reemplazó a dios
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